Probablemente vamos a juzgar o justificar las imágenes que veremos a continuación pero a modo de opinión personal no creo que haya justificación alguna para que un luchador se atreva a agredir a un aficionado, esto sería un "Pecado mortal".
Si bien es cierto que un fanático no debe NUNCA intervenir en las luchas también es cierto que estas situaciones no son culpa de la persona que paga una entreda para divertirse y ver a sus ídolos arriba de un ring. Tal vez podamos controlar la entrada a un espectáculo, requisar muy bien al público que asiste, pero lo que no podremos hacer es controlar la adrenalina y la presión tanto del luchador como la de un aficionado.
Por eso en la mayoría de eventos siempre existen unas barreras que separan al público del evento central, esto no se aplica en nuestro país, tampoco la debida requisa ni la utilización de fuerza pública que pueda intervenir cuando algo se salga de control.
Esto simplemente es una recomendación de algo que nos puede afectar a todos.
viernes, junio 04, 2010
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1 comentarios:
se lo tiene merecido por desgraciado, el tratar de quitarle la máscara a un luchador es un insulto.
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